Los estudios ciencia, tecnología, sociedad e innovación en el sistema de educación superior
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Revista de la Universidad de Guayaquil Nº 113,
Mayo - Agosto 2012, ISSN 1019 - 6161
entonces, las instituciones de educación supe-
rior de Latinoamérica en el siglo XXI mode-
laran profesionales que no solo se preocupen
de tener altas calicaciones sino que sean
suscitadores de un futuro que garantice a los
profesionales ser competentes, pro-efectivos y
expertos,enseñándoles a vivir y desear esa con-
vivencia para toda la vida, acionarse por ella,
porque la educación es vida, ya que el ser hu-
mano es un sujeto educable mientras vive. Tam-
poco debe confundirse la educación permanente
con la educación concurrente, ni con el reci-
claje o perfeccionamiento profesional. Es eso y
mucho más. Es la integración de todos los recur-
sos docentes. La educación debe ser la brújula,
el faro, el ancla de la realidad nacional como
nación. La educación contemporánea ya no es
solo educar para trabajar. Así lo ratica el in-
forme sobre educación del siglo XXI también co-
nocido como “ la educación es un tesoro”, pero
arma que para llevar a cabo esta visión mucho
dependerá del investigador cientíco académi-
co, ya que se constituye en el principal activo
del capital humano, pues tiene que despla-
zar el miedo a la metamorfosis, aceptar des-
aparecer para transformarse como el gusano en
mariposa, enfrentar la concepción de la enfer-
medad como un conicto del alma, desplazar la
ciencia de la contemplación , para orientarse al
descubrimiento con libertad que la fe ciega no
le permite, lo cual es un rasgo contemporáneo
de la investigación ( AGASSY),1996, posición que
comparto ya que no se desenvuelve en un vacio
social sino en el seno de comunidades que son
las productoras y validadoras de conocimientos,
considerando que una sociedad es semejante a
un organismo y no como lo atribuyó la concep-
ción losóca de Adams Smith y los economistas
neoclásicos que da lugar a la disyuntiva indi-
vidualismo – globalismo, pues ellos concibieron
a la sociedad a semejanza de un gas compuesto
por átomos casi independientes entre sí.
Un investigador cientíco, hoy en día ya no es
sólo la imagen intelectualista (PRICE),1980, sino
que tiene que convivir, coexistir con las con-
troversias, contradicciones, brechas y desigual-
dades que han aumentado entre el cono Norte
,Sur y Europa (VACCAREZZA), 1980, creando in-
certidumbres debido a la enorme variedad de
la realidad en especial en el mundo hispano,
que aunque ha logrado 5 nobeles, cuyos pro-
tagonistas son: Santiago Ramón y Cajal, Severo
Ochoa, Banny Benacerraf,Cesar Milstein y Ber-
nardo .Houssay, que aunque se limitaron a las
ciencias de siología y medicina, no teniendo
paralelos en matemática o en física, en quími-
ca o en ciencias de la Tierra, en psicología o en
sociología, en economía o historia, sin hablar de
la tecnología, esto demuestra que es posible ha-
cer investigación cientíca; también muestran
que es falso que los pueblos hispánicos no están
biológicamente dotados para hacer investiga-
ción cientíca y original. Cabe resaltar lo que
Bernardo Houssay mencionó en relación a la
importancia de la investigación básica y su con-
tinuidad con la ciencia aplicada: sin investiga-
ción aplicada no hay tecnología original, y reco-
mendó entonces a los jóvenes cientícos, que
fuesen al exterior antes de haberse doctorado
y familiarizado con las posibilidades de su país,
pues el investigador viene en primer término, los
recursos después: que es una locura construir y
equipar laboratorios a fuerza de dinero, sin jar-
se en quienes habrán de usarlos.
Por ello, el cientíco de hoy, debe actuar con
postura ética, pues todo lo sólido se desvanece
en el aire (MORIN), 1999, dada la condición hu-
mana o humana condición. En todo caso, lo que
ocurre es que el hombre tiene espontaneidad,
capacidad creadora, y como se conoce poco a
ese respecto, cuando interviene como objeto
en los procesos que se estudian, se introduce
un alto grado de imprevisibilidad. Sin embargo
debe enfrentar sin vacilación, sin estereotipos,
creencias, prejuicios losócos entre ciencia y
tecnología entendiéndose por ciencia la bús-
queda honesta de la verdad que a diferencia
que en la tecnología vale robar ideas, cam-
biar la calidad de los productos, con mentiras
que justican el conocimiento ciego que oculta
la verdad. El cientíco de hoy debe liderar los
procesos sociales, ser una fuerza social extraor-
dinaria para resolver problemas cientícos y
detectar necesidades maniestas y ocultas por
cuestiones de moral y política. Ser un ser huma-
no que piense localmente y actué con trascen-
dencia y signicación global en el desarrollo y
consolidación de los estudios CTS+I.
El cientíco académico del sistema universita-
rio debe estar compenetrado de que la Univer-
sidad, ser el centro de la sociedad de conoci-
mientos, desde luego que es la institución más
importante dentro de este complejo proceso
de creación y distribución de conocimientos,
conocido actualmente como explosión de co-
nocimientos, que presenta otras características
de innovación: las de un conocimiento acelera-