prácticas para fomentar un entorno educativo
resiliente y adaptado a las necesidades del
contexto post-pandemia. En este sentido, el
estudio destaca la importancia de implementar
programas psicológicos, optimizar el uso de
plataformas virtuales, fortalecer las redes de
apoyo y garantizar una gestión equitativa de los
recursos y espacios universitarios. Al final, se
espera que estas estrategias contribuyan a mejorar
el bienestar emocional y académico de los
estudiantes, consolidando una formación
universitaria integral y sostenible.
Materiales y Métodos
Tipo y Diseño de Investigación
El presente estudio utiliza un enfoque mixto,
combinando métodos cuantitativos y cualitativos.
El diseño es descriptivo y transversal, adecuado
para evaluar el impacto de los desafíos derivados
de la pandemia de COVID-19 en la convivencia
y formación académica de los estudiantes
universitarios de la Universidad de Guayaquil.
Población y Muestra
La población objetivo está compuesta por
estudiantes y profesores de la Universidad de
Guayaquil. Para asegurar la representatividad, se
seleccionaron las 17 facultades de la institución,
abarcando una muestra diversa en términos de
características demográficas y académicas. Se
utilizó un muestreo probabilístico estratificado, lo
que permitió incluir diferentes subgrupos de
interés.
Criterios de Inclusión:
• Estudiantes (469) matriculados en las
facultades seleccionadas durante el
período académico 2024-2025 del Ciclo I.
• Profesores (57) con al menos un año de
experiencia docente en la Universidad de
Guayaquil.
educación, lo cual exacerba las desigualdades
existentes entre los estudiantes.
En cuanto a las redes de apoyo, se ha
demostrado que estas desempeñan un papel
crucial en el bienestar emocional y el éxito
académico de los estudiantes. Guamán-Guevara y
Teneda (2023) destacan que estas redes no solo
mitigan el impacto psicológico de la pandemia,
sino que también fomentan la cohesión y el
sentido de pertenencia en la comunidad
universitaria. En el caso específico de la gestión
de recursos y espacios físicos, Ortiz Zurita y
Coromina Soler (2021) enfatizan la importancia
de una planificación efectiva para promover un
entorno de convivencia saludable y equitativo.
En el contexto de la Universidad de
Guayaquil, los desafíos derivados de la pandemia
han sido particularmente evidentes. Las
interacciones sociales y académicas han sufrido
una disrupción significativa, afectando no solo el
aprendizaje, sino también el desarrollo personal
de los estudiantes. A pesar de estos retos, el
escenario post-pandemia también presenta
oportunidades para implementar estrategias
innovadoras que fortalezcan la resiliencia y
promuevan un entorno educativo más inclusivo y
cohesionado.
Este estudio tiene como objetivo principal
evaluar el impacto de los cambios en las
dinámicas de convivencia e interacción social
entre los estudiantes universitarios de la
Universidad de Guayaquil, con énfasis en su
influencia en la salud mental, el rendimiento
académico y el desarrollo personal. Mediante el
empleo de una metodología de enfoque mixto, se
busca proporcionar una comprensión integral del
problema y generar recomendaciones que
contribuyan al diseño de políticas proactivas y
estrategias personalizadas.
La investigación no solo aborda una
problemática de gran relevancia académica y
social, sino que también propone soluciones
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